lunes, noviembre 28, 2005

El porqué de Temporal de Trenes

El porqué de Temporal de Trenes.

La verdad, en este día que han pasado muchas cosas, explicar la razón de ser de Temporal de Trenes parece estar demás. Pero para quién llegue a esta estación y se pregunte el porqué del nombre de este blog, será bastante introductorio.

Desde niño tuve una relación de amor/odio con los trenes. Teniendo unos muy cortos 3 o 4 años y viviendo muy cerca de la línea férrea en Quillota, ver pasar el ferrocarril y acercarme cuanto fuera posible a este me apasionaba. Ahora, de noche, mi subconciente me engañaba y me provocaba repetitivas pesadillas (cuando hablo de repetitivas, es siempre el mismo sueño, todos los días del año y por un par de estos últimos) por lo que terminaba despertándome de madrugada, agarrando mi confiable y blanda almohada, como si me fuera a proteger de algo, y partía a la habitación de mis padres, por desgracia de ellos me imagino.

En esa temporada de cerca de 4 años que viví en Quillota, eran constantes los paseos en patota al llamado "Espino Bonito" cuyo nombre oficial es el Cajón de San Pedro y el cual en estos momentos es un fundo plagado de palta hass, que año a año va directo a los gringos. Para llegar a este lugar atravezabamos tres cruces ferroviarios y nos deteníamos justo y preciso en la estación de San Pedro, que en aquellos tiempos estaba llena de locomotoras y vagones haciendo maniobras (este es el nombre técnico de los movimientos de los carros).
Esperando dentro de una noble citrola tipo furgón, me quedaba mirando y decía "oooh un temporal de trenes" sin saber que mierda era un temporal, pero yo lo asociaba con muchos. De hecho se me imagina sin exactitud que debo haber escuchado esa palabra, aparte de los noticiarios, de un comercial que daban de los temporales culturales en Puerto Montt.

De esta forma vivía pensando que en la Estación San Pedro habían temporales de trenes haciendo maniobras y en las noches, "temporales de trenes" me seguían incesantemente por donde anduviera, hasta el momento de despertar, asustado a mangos.

He ahí el origen de este blog al repetirse esta frase nuevamente en mi vida, sólo que esta vez sinceramente me acuerdo y me cago de la risa. (Aún sueño con trenes a veces, pero ahora me hago el valiente cuando me siguen y efectivamente pasan de largo, claro está ya no se me figuran la fantasías de antaño).